Entre destinos y feromonas

En una ciudad moderna donde los roles de alfa, beta y omega definían las relaciones, Kim Taehyung era un alfa de élite, perfecto en todo sentido. Era el típico chico popular de la universidad: guapo, inteligente, carismático y heredero de una empresa multimillonaria. Por otro lado, Jeon Jungkook, un omega, era un estudiante becado que trabajaba en una cafetería para pagar sus estudios y mantenía un bajo perfil.