Zöe era una niña normal, más que una niña, una adolescente normal. Con sus cambios de humor, sus ganas de salir y sus primeros amores.
Siempre había sido la chica popular del instituto, la chica deseada por todos los adolescentes.
Pero después del verano antes de su último curso, todo cambió.
Empezó a vestir de oscuro, a aislarse, a ser una chica solitaria. Estaba enamorada de un chico que conoció ese mismo verano, Ethan.
Un chico raro, solitario e incluso un poco extravagante. El la había iniciado en su mundo, un mundo oscuro, el mundo de la noche, no de la fiesta, sino de aullar a la luna y salir de caza.
Ethan era de padres... diferentes. Su madre había pertenecido a un famoso clan de vampiros y su padre un hombre lobo. Él era un mestizo. Sólo quería ser un adolescente normal hasta que la conoció.
Ella estaba demasiado interesada en aquel mundo, quería estar con él, lo aceptaba y quería como lo que era: el amor de su vida.
Pero Zöe desapareció y el sólo pudo ver un extraño rastro de sangre.
Secretos que pesan más que los suspiros, dos corazones agonizantes anhelando ser salvados, aquellos corazones heridos que buscan una cura, al otro.
Unidos por una conexión que desafía las barreras del tiempo, descubren que el amor puede florecer incluso en medio del caos familiar que los rodea.
Mientras ambos luchan por encontrar su lugar en un mundo donde sus caminos no pueden cruzarse, las cicatrices ocasionadas por sus familias y los fragmentos de un amor perdido los persiguen. ¿Es posible soltar a quien una vez fue tu todo, aún cuando el destino parece decidido a mantenerlos separados?
Un amor, una pérdida y segundas oportunidades que demuestra que, a veces, lo más valiente es aprender a decir adiós.
Pero, ¿Crees poder despedirte del amor de tu vida?
*Aclaro que este es un borrador de la novela, lo comencé a escribir por septiembre del 2023 y si tiene errores ortográficos me disculpo*