Tras caer en la batalla final contra el Rey de la Noche, Jon Snow se encuentra en un oscuro vacío, donde un dios lo confronta. Este ser celestial, le revela que su sacrificio no fue suficiente y que, en su muerte, el Rey de la Noche prevaleció, convirtiendo todo Poniente en un páramo helado. Sin embargo, también le ofrece una segunda oportunidad, regresar al pasado con todo el conocimiento de los eventos futuros para prevenir la caída de los reinos humanos.
Jon entonces, despierta años antes del comienzo de la guerra de los Cinco Reyes, cuando aún es el bastardo de Winterfell, cargando no solo con la verdad de su linaje Stark y Targaryen, sino también con el peso de su misión. Comprende que para unir a Poniente y preparar a los Siete Reinos contra la amenaza del Rey de la Noche, debe convertirse en algo más que un bastardo o un Lord Comandante. Debe convertirse en Rey.
Pero el camino hacia el trono está lleno de desafíos, deberá enfrentar su propio dilema interno, aceptando tanto su sangre Stark como Targaryen, mientras lucha por ser el líder que Poniente necesita, no el que desea. Pero Jon pronto descubre que incluso con todo el conocimiento del futuro, el pasado no es tan fácil de cambiar.
En esta lucha por la supervivencia, Jon Snow no solo debe evitar el regreso del Rey de la Noche, sino también redimir a los Siete Reinos de su eterno ciclo de traiciones, guerras y destrucción. En su búsqueda, aprenderá que ser un rey no se trata de reclamar el poder, sino de sacrificarlo todo para proteger a los vivos.
Tras la muerte de sus padres, Evie debe dejar su vida como pogue atrás. Ahora, su tutela pertenecerá a su tía materna, lo que la llevará a vivir en Figure Eight y por tanto alejarse de sus amigos. Sin embargo, ahora otra clase de personas aparecerán en su vida.