Vine aquí con un solo propósito y tenía claro que no sería fácil. Sabía que temblaría como si padeciera parkinson, se que todo el esfuerzo que le estoy poniendo a esta situación valdrá la pena. Eso es lo que me dije a mi mismo cuando pedí este favor a un cliente para reunirse con un ocupante de este lugar. Y es que me repetía una y mil veces mientras conducía hacia la cárcel estatal esta mañanaAll Rights Reserved
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