Ésta es la historia de amor que surge entre Alejo y Kudai.
Alejo es un hombre jóven, que se dejó estar por mucho tiempo, debido a una misteriosa depresión, hundiéndose por completo en la miseria, como si estuviera muerto en vida.
Kudai, Fabián, Gustavo y Leny son un grupo que trabajan en equipo para el ayuntamiento de la ciudad.
Ellos se encargan de atender a las personas más necesitadas, en su mayoría, son ancianos que no tienen familiares, recursos y hasta incluso falta de voluntad para vivir en dignas condiciones.
Alejo cuando es invadido por éstos jóvenes, no habla una sola palabra, se deja ayudar sin poner resistencia ni agradecimiento, como son los demás casos por lo general.
Kudai y Alejo en cuanto se ven a los ojos, sienten una energía indescriptible, dejándose llevar por sus sentimientos, se conectan a través de lo que tienen a su alcance, ella con palabras, él con sus manos, ambos con las miradas.
Fabián, quién está enamorado de Kudai, siente celos, se da cuenta que éstos son atraídos e intenta persuadirla, con la excusa de que Alejo pueda ser, tal vez un delincuente, incluso hasta alguien que pueda hacerle daño.
Hay una maldición escondida bajo siete llaves.
En Zarek nace la habilidad que podría ser la llave maestra.
Se acciona el reloj y empieza el conteo regresivo.
No serán tiempos sencillos, la información es escasa y el camino parece intransitable, con ayuda de sus aliados emprende la marcha hacia su destino. ¿Lograrán su cometido?
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