• En un impulso, Haechan estiró la mano y tocó la copa de Jisung, un gesto pequeño pero lleno de una ternura inexplicable, como si intentara ofrecer algo de consuelo en medio del caos. -¿Y si dejamos todo eso atrás por un rato? Solo... olvídalo. Olvidemos el dolor, las promesas rotas, las palabras no dichas.All Rights Reserved