Allice Donovan, es una princesa acomodada en la alta sociedad, su vida es tranquila, siempre bajo la protección de sus padres.
Allice no conoce de peligro, no sabe de malos sentimientos, ni el significado de un corazón roto, su burbuja es reforzada día a día por su entorno y sus padres que la protegen de cualquier peligro existente, logrando así que en sus ojos no albergue lo malo, en su corazón no exista tristeza y en sus pensamientos no haya cabida para el temor.
Pero se verá obligada a ser desaforada de la protección en la que ha Sido criada, será arrancada de los brazos protectores que siempre la han salvado, se enfrentará a un mundo cruel, lleno de engaños, infortunios, tormentos, ansia de poder, de prevalecer en la monarquía, un mundo para el que no está preparada.
Pero tendrá que aprender a vivir en el, conociendo así, que no tocan tu corazón una vez y que todo lo que parece casi nunca es.
Lady Mildred Hess, pensaba que el amor de su vida pronto regresaría para casarse con ella; sin embargo, con un desahucio para abandonar la propiedad familiar después de la muerte de su padre, su vida ya no se tratará de esperar, sino de actuar por el bien de sus hermanas.
Daniel Cooper, conde de Cholmondeley, nuevo dueño de Autum Hall, quería tomar posesión de aquel lugar para dedicarlo a ser una residencia solariega para sus diversiones de libertino; no obstante, la aparición de una de sus residentes lo lleva a hacer una promesa a cambio del sacrificio de la joven.
¿Mildred esperará por una ilusión o terminará cediendo ante sus deseos prohibidos por Daniel?