No me mires, que me distraigo

Aida ha dejado todo atrás para estudiar en una nueva ciudad, pero la soledad y los conflictos internos pronto se convierten en su mayor desafio. En el edificio donde vive conoce a Diego, su vecino encantador, que parece ser la solucion a su vacio emocional. El le ofrece atención, compañía y palabras que la hacen sentir especial. Sin embargo, no todo es lo que parece, diego oculta secretos y comportamientos que comienzan a desgastar su autoestima y su percepción de la realidad.
En medio de esta tormenta emocional, Aida encuentra un respiro en su profesor, Gabriel un hombre que, con su guía y atención, la impulsa a destacarse académicamente. Pero lo que comienza como admiración profesional se transforma en una conexión ambigua que desdisbuja los limites entre lo correcto y lo prohibido.
Aida deberá enfrentarse a las relaciones que la rodea, cuestionar sus decisiones y descubrirse a si misma mientras camina por una delgada línea entre el deseo, la manipulación y el amor propio.

Es una historia que explora la vulnerabilidad, la busqueda de identidad y el impacto de las conexiones humanas en el viaje hacia el autodescubrimiento.