Resurgir del Gran Clan Potter: Natus Vincere

Hace tres siglos, el Palacio Potter ardía en llamas mientras hordas de cazadores mágicos y enemigos ancestrales asediaban sus murallas. Lord Alearic Potter, ultimo Kaltharíe se alzaba en el salón principal, rodeado de sus 15 compañeras y 50 hijos.

El aire estaba cargado de llanto y desesperación. Sus hembras, de múltiples razas -veelas, brujas, vampiras y dos Kaltharíes puras-, sabían lo que su amado estaba a punto de hacer.

Uno a uno, besó a todas sus hembras: Selene, Amara, Elandra, Miriel, Kaelia, Ysara, Nymeria, Althea, Sophia, Liora, Thalia, Elenya, Vivienne, Maelis y Aurora. Luego, se inclinó ante sus hijos, acariciando sus cabecitas con una sonrisa rota.

Sus hembras gritaron cuando él las obligó a retroceder con un hechizo de repulsión. Miriel intentó atravesar el muro mágico, llorando pero no lo logro

Entre lágrimas y resistencia, todas fueron teleportadas con sus hijos a salvo.

Solo él permaneció. Alzó su varita y pronunció el conjuro final:
-Potentiam nostram claude, sanguinem nostrum occulta, draconis naturam in tenebris repone. Familiam meam protege... Ego Potter sum, et meum sanguinem sigillo.

Un torrente de fuego dorado lo envolvió. Una lanza de magia oscura atravesó su pecho justo al terminar el encantamiento. Cayó de rodillas, con una sonrisa de paz.

Los enemigos creyeron que los Kaltharíes habían desaparecido. Él, en sus últimos pensamientos, sonrió. Sabía que un descendiente surgiría en el futuro, destinado a restaurar el linaje con un poder aún mayor que el suyo.

🥇baddumbledore / 31-10-2025