Cuando el pingüino macho se enamora, busca una piedra para entregarla a un pingüino hembra; esta roca significa la futura formación de un nido común. El macho se inclina y coloca la piedra enfrente de la hembra. Si ella la acepta, significa que lo reconoce como pareja.
Esto intenta hacer Obanai al descubrir tan "tonto" hábito según él, claro que a su manera.
Cuando Obanai se enamora, busca la piedra que más le parezca preciosa, y se la lanza a la persona de la cual está enamorado.
Curiosamente siempre se le ve tirándole piedras al pilar del agua.
Mientras todo eso pasaba, los pilares veían a la pareja de "pingüinos" con burla, y otros con ternura.