En un mundo donde el odio, el rencor y la venganza dominan los corazones, la belleza superficial se ha convertido en el único estándar aceptable. Pero, ¿Qué ocurriría si ese mal latente se transformara en caos absoluto?
Slenderman, la criatura que habita en las sombras, tiene un plan: usar el caos para manipular a la humanidad, sumir al mundo en la oscuridad y derrotar a su eterno enemigo, Zalgo. Para lograrlo, necesita encontrar la fuente del poder del caos.
Esa fuente es una chica que, a simple vista, parece una adolescente de 14 años. Sin embargo, su apariencia engaña: tiene 19 años y lleva dentro de sí un poder inimaginable. Desde su nacimiento, el caos duerme en su interior, esperando ser despertado.
Slenderman la encuentra, dispuesto a usarla para sus oscuros propósitos. Pero algo inesperado ocurre. Mientras más la observa, mientras más descubre quién es realmente, un sentimiento desconocido comienza a crecer en él: amor. Un amor oscuro, voraz y obsesivo que amenaza con consumirlo.
¿Podrá la chica amar a un monstruo que encarna las sombras mismas? ¿O será el caos en su interior quien termine destruyéndolos a ambos?
El pueblo de Wilson es tranquilo, regido por sus costumbres y creencias religiosas muy estrictas, donde Leigh ha crecido, siguiendo cada regla y pauta como se le ha indicado. Un pueblo donde no se recibe con mucha gracia a los recién llegados así que cuando Los Steins se mudan a su lado, Leigh no puede evitar sentir curiosidad.
Los Steins son adinerados, misteriosos y muy elegantes. Lucen como el retrato perfecto de una familia, pero ¿Lo son? ¿Qué se esconde detrás de tanta perfección? Y cuando la muerte comienza a merodear el pueblo, todos no pueden evitar preguntarse si tiene algo que ver con los nuevos miembros de la comunidad.
Leigh es la única que puede indagar para descubrir la verdad, ella es la única que puede acercarse al hijo mayor de la familia, el infame, arrogante, y frío Heist.