Ya había pasado un año desde que el infierno en el que vivía Ash terminó y ahora vive en Japón con su amado Eiji, en este año, las cosas mejoraron bastante, Ash ha estado yendo a terapia y Eiji por su lado, volvió a hacer ejercicio, llevaba una vida más tranquila de lo que jamás había tenido, hasta ahora, pleno verano donde comenzaron a surgir otros deseos que van más allá de abrazar o besar a Eiji, quien parece no estar interesado o siquiera ser consiente de lo sugerente que puede llegar a ser.
//aclaraciones//
las personas que tienen traumas respecto a lo sexual como es el caso de Ash, no significa que son asexuales, estas también pueden llevar una vida sexual sana y activa.
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