Siempre fuiste tú

Tras los primeros años de una infancia muy complicada, marcada por unos progenitores que no habían nacido para ser unos buenos ejemplos, Renée pasa a estar bajo la tutela de los servicios sociales durante toda su infancia y adolescencia, y sin dejar que los hechos ocurridos en sus primeros años de vida marquen toda su vida, una vez alcanza la mayoría de edad está decidida a cumplir su mayor sueño, trabajar como manager de pilotos de la Formula 1. Aunque lo que ella no sabía es que mucha gente se cruzaría en su camino, pero una de esas personas le marcaría tanto que aunque ambos no lo buscasen, siempre acababan encontrándose.