《❍⌇─➭⌗ ęʆ 𝒍𝓪𝕫ó 𝚚ᶶέ η𝙪ηcɐ ŧócó έȴ cῖέ𝓵o: ๑ ˚ ͙۪۪̥◌ ⌨》

໑₊ ˚✧Σᥲ𝗿𝓽んc𝓊𝖗ƴ ꒷꒦‧₊˚

(☉｡☉)!→ +:｡.｡-𝐌έ®cůʳ𝑖⊙ x 𝑇𝑖έ𝚛𝚛ᵃ-｡.｡:+*

​En la vastedad del cosmos, donde los astros giran en eterna danza, existían dos almas celestes destinadas a mirarse, pero nunca a tocarse: Mercurio, el mensajero ardiente del sol, y la Tierra, el corazón azul del universo.

Mercurio lo admiraba desde lejos, fascinando por su belleza cambiante, su manto de nubes y océanos que susurraban historias que él nunca podría escuchar del todo. En su órbita veloz, cada giro era una mirada robada, un intento de acercarse a lo imposible. Pero la cercanía no era su aliada, pues si él se aproximaba demasiado, su calor abrasador podría consumirlo.

La Tierra, por su parte, sentía la presencia de Mercurio como un eco constante, un faro brillante en la distancia. Aunque nunca podrían compartir un abrazo celeste, su luz, tan persistente como la eternidad misma, le hablaba de sueños de conexión, de la posibilidad de algo que su propia gravedad nunca le permitiría alcanzar.

Porque siempre habria una unión, sosteniéndose en un amor que no necesitaba contacto, solo un lazo eterno esperando poder tocar el cielo...