Han pasado nueve años desde la desaparición de los ángeles y el mundo disfrutó de una paz relativa. Sin embargo, las anomalías dimensionales no se han detenido por completo. Pequeñas brechas siguen apareciendo, trayendo consigo criaturas y aberraciones que desafían la tranquilidad del planeta.
Kenji Nakazawa, ahora con 16 años, ha heredado no solo el espíritu guerrero de su hermano mayor, sino también su sentido del deber. Entrenado por Furokawa y Zero en el dojo de la familia de Furokawa, Kenji ha pasado años perfeccionando sus habilidades, tanto físicas como estratégicas, para enfrentarse a lo desconocido.
Aunque Brick decidió retirarse del ejército, sigue siendo una figura paterna para Kenji. En la casa de Tsuji, llena de recuerdos y legado, Brick actúa como un mentor sabio, compartiendo historias de las batallas pasadas y aconsejando a Kenji sobre las responsabilidades de ser un protector.
Sin embargo, el equilibrio comienza a desmoronarse. Una noche, mientras Kenji patrulla con un pequeño grupo de aliados, una brecha enorme aparece cerca de Rorschach City, más grande que cualquier otra vista antes. De ella emergen no solo aberraciones, sino también un ángel menor, indicando que la amenaza de Arkheim está lejos de haber terminado.
Kenji, junto a un nuevo equipo de jóvenes guerreros y sus viejos aliados, debe tomar el liderazgo en esta lucha. En el dojo, Furokawa y Zero, aunque más experimentados y sabios, deciden volver al campo de batalla, dejando atrás el retiro para ayudar a su "pequeño hermano" en esta nueva guerra.