En corazón de acero, un alma cautiva,
Kaiju y máquina, en danza combativa.
Piloto en su nido, un titán de metal,
Luchando contra sí, en un duelo fatal.
La bestia interior, rugiendo en su mente,
Sed de destrucción, una fuerza inminente.
El copiloto, ancla en la tormenta,
Guiando la razón, en la mente atormentada.
En tierra de nadie, donde los gigantes rugen,
La humanidad lucha, mientras el destino juzga.
Un vínculo extraño, forjado en el dolor,
Piloto y máquina, en eterna unión.
La conciencia del kaiju, un peso que cargar,
La cordura del hombre, un fuego que avivar.
En cada combate, una lucha interior,
Por dominar al monstruo, y encontrar el honor.
En la danza de muerte, donde el acero se quiebra,
El piloto se aferra, a un hilo de esperanza.
Con cada golpe, con cada rugido,
Nace una leyenda, en esta tierra olvidada.
Así Comienza la Leyenda del "DRAGON DEL PACÍFICO"
El Ciclo de Invierno Eterno: LIBRO 3
La paz, como un manto de nieve recién caída, cubría el Reino de las Nieves. Tras la tormenta de oscuridad y la purificación del Corazón de Hielo, el reino había encontrado un equilibrio delicado, una danza entre el invierno y la primavera. Anna, la reina sabia, guiaba a su pueblo con mano firme y corazón generoso, recordando siempre las lecciones aprendidas en la lucha contra la oscuridad.
Pero la paz, como el hielo delgado, podía romperse con facilidad. En las sombras de las montañas de cristal, Orión, el Guardián del Hielo, velaba por el Corazón de Hielo, su presencia un eco silencioso en el viento helado. Su soledad era un sacrificio, un juramento silencioso para proteger el reino de las sombras que aún acechaban.
En las profundidades del olvido, un susurro antiguo comenzó a resonar. Un nombre olvidado, un poder oscuro, una sombra que se extendía como una plaga sobre la tierra. La Hechicera Amaya, una leyenda enterrada en el hielo del tiempo, despertó de su letargo, buscando reclamar lo que una vez fue suyo. El Cetro de la Aurora, el Escudo de Diamante, el Corazón de Hielo: los artefactos de poder, las llaves para desatar el Invierno Eterno.