Dicen que, si quieres sentirte cerca de alguien que físicamente se encuentra lejos, debes mirar al cielo; siempre será el mismo. Yo, en cambio, creo en los matices. Por ejemplo, cuando un avión deja una estela en una noche despejada, esta solo es visible desde determinados lugares. Y tú te preguntarás: ¿qué tiene que ver eso con esta antología de relatos? Pues todo y nada, la verdad. Si quieres un símil, tú eres quien observa el cielo; los relatos, la estela que deja un avión que no siempre se ve... ¿O solo hay que saber mirar? Ideas preconcebidas, juicios, prejuicios... ¿Qué ocurre cuando nada es lo que parece? Te reto a que leas, solo eso. Deja la intuición de lado, sujeta tu imaginación y no permitas que eche a volar antes de finalizar. ¿Te animas??All Rights Reserved
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