Felipe siempre ha pensado que tiene una maldición desde pequeño, pues es un pobre muchacho desafortunado que nada puede hacer sin que el destino lo arruine. Hasta que conoció a Matilda, una chica radiante y alegre que hace todo lo que está en sus manos para ver una sonrisa en el rostro de su considerado amigo, Felipe. (voy a llorar escribiendo esta mierda, lo presiento.)All Rights Reserved