Aquí vamos otra vez

Se suponía que iba a ser una simple salida con sus amigos. Después de todo, por fin habían terminado las clases y podían disfrutar de unas merecidas vacaciones. Una tarde tranquila, sin preocupaciones, era justo lo que necesitaban. Entonces, ¿por qué demonios estaban en la comisaría a las cinco de la mañana, empapados y completamente fuera de lugar?

La imagen utilizada en la portada no es de mi autoría; la encontré en Pinterest. Todos los créditos son para su respectivo creador. Los personajes tampoco me pertenecen, ya que son obra de Eiichiro Oda