𝒞𝒶𝓇𝓉𝒶𝓈 𝓅𝒶𝓇𝒶 𝒞𝒶𝓂𝒾𝓁𝓁ℯ

𝐂𝐚𝐦𝐢𝐥𝐥𝐞 𝐁𝐞𝐚𝐮𝐟𝐨𝐫𝐭 : Levi Ackerman era como el mar. Un vasto e insondable abismo, capaz de reflejar en su superficie la calma de un día despejado o el caos de una tormenta desatada. Sus ojos, tan grises como las estrellas atrapadas en un cielo nublado, a veces pigmentaban a un azul profundo, como si escondieran la totalidad del océano en su mirada. Había algo en él que atraía, un magnetismo oscuro y ancestral, como si su sola presencia pudiera arrastrarte hacia aguas desconocidas, donde la luz apenas llegaba. Era imposible descifrarlo por completo, como si cada gesto suyo fuera una ola que se deshacía antes de tocar la orilla.

Entre ese vaivén de enigmas llegaron las cartas. Firmadas por nadie, impregnadas de una sinceridad que solo podía encontrarse en el anonimato. Palabras que flotaban como botellas lanzadas al océano, encontrando a Camille como si él supiera exactamente dónde romper las olas de su alma. Las letras eran precisas, a veces ásperas, otras tan delicadas que parecían hermosos trazos prolijos, pero siempre quedaba esa incógnita: ¿quién las escribía?

Ella podía sentir en cada frase un eco de tormentas contenidas, de algo inmenso que él mismo parecía no saber cómo expresar. Pero mientras intentaba descifrarlo, Levi seguía siendo eso: un mar en calma que ocultaba su verdadero rostro bajo un millón de secretos. Y cada carta, aunque anónima, era una marea que la arrastraba más cerca de un abismo que ella aún no podía ver del todo.

𝐂𝐮𝐚𝐥𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫 𝐩𝐚𝐫𝐞𝐜𝐢𝐝𝐨 𝐚 𝐨𝐭𝐫𝐨 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜 𝐞𝐬 𝐩𝐮𝐫𝐚 𝐜𝐨𝐢𝐧𝐜𝐢𝐝𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚
𝐋𝐚𝐬 𝐢𝐦𝐚𝐠𝐞𝐧𝐞𝐬 𝐮𝐭𝐢𝐥𝐢𝐳𝐚𝐝𝐚𝐬 𝐧𝐨 𝐬𝐨𝐧 𝐝𝐞 𝐦𝐢 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚.