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22 parts Ongoing Charles Leclerc no era alguien que viviera con arrepentimientos. CreΓa firmemente que, si querΓa hacer algo, debΓa hacerlo sin dudarlo, porque sin importar el resultado, siempre quedarΓa la experiencia. La vida era corta y Γ©l planeaba vivirla sin remordimientos.
Sin embargo, mientras manejaba por las calles desiertas de MΓ³naco a las tres de la madrugada en busca de sushi, comenzΓ³ a cuestionarse un par de cosas. No se arrepentΓa en lo absoluto de haber decidido formar una familia con Carlos. Lo que sΓ lamentaba, quizΓ‘ un poco, era haber sido tan confiado al decirle que pidiera lo que quisiera, cuando quisiera, que Γ©l se lo concederΓa sin importar la hora.
Porque claro, su omeguita embarazado habΓa tomado esas palabras demasiado en serio.
SuspirΓ³, tratando de ignorar el frΓo de la noche mientras conducΓa. En algΓΊn punto de su vida, entre circuitos y podios, se habΓa imaginado noches de insomnio por nervios antes de una carrera, pero nunca pensΓ³ que sus desvelos serΓan por una misiΓ³n culinaria de emergencia.
Y aun asΓ, ahΓ estaba, porque si algo tenΓa mΓ‘s grande que su orgullo era el amor que sentΓa por Carlos... aunque maΓ±ana definitivamente renegociarΓan los tΓ©rminos de esos antojos nocturnos.