Linda es una zorra.

Hola, mi nombre es Linda y creo que tengo un problema. Pues bien, desde que tengo apetito sexual no me he sentido completamente satisfecha nunca. Esto no quiere decir que no haya tenido buen sexo o que mis parejas no me supieran satisfacer, lo que pasa es que después de tener un orgasmo estoy pensando en otras formas de conseguir más y más y más. Mis dedos para nada son suficientes, he probado con el mango del cepillo de pelo (y el de dientes también), con algún desodorante y hasta con el clásico pepino grande que sale en las películas subidas de tono.

También descubrí que soy masoquista y me encanta torturarme, me pego con una regla en las tetas y me encanta como quedan entre rojas y moradas, para luego apretar los pezones irritados y sentir placer del dolor. Me encanta imaginar que alguien me mira y me ordena a hacer cosas como estar en una posición humillante o andar todo el día sin bragas.

Tal es mi punto de perversion que en una ocasión decidí asistir a clase con una falda plisada y sin bragas solo por sentir le morbo. Y aquí es donde empieza la historia que quiero contar. La historia de cómo cumplí mis deseos más profundos y me volví una puta sin remedio.

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• Este libro contiene escenas de sexo, abuso y degradación explícitas.
• Por favor si son sensibles a estos temas, leer bajo su propia responsabilidad.
• Esto es BDSM puro y duro, no una historia de amor.

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Todos los personajes y ubicaciones son ficticios. Cualquier parecido a la realidad es pura coincidencia ;)

(Siempre quise decir eso)