En una Argentina del futuro, deslumbrante por sus avances tecnológicos y sus teatros relucientes como joyas en el corazón de Buenos Aires, Théophile Laurent surge como un personaje profundamente humano y exquisitamente complejo. A sus 23 años, este joven bailarín de ballet, marcado por las cicatrices de una infancia trágica -la muerte de su madre y el abandono de un padre consumido por el alcohol-, se enfrenta a un mundo donde la modernidad promete igualdad, pero el alto costo de vida es una daga que ahoga los sueños más nobles.
Théophile no es un bailarín común; su arte trasciende fronteras al reinventar el ballet clásico, vistiéndolo con la melancolía y la sensualidad indomable del tango argentino. Cada uno de sus movimientos, como una pincelada en un lienzo vivo, encapsula la fragilidad de la existencia humana y la audacia del alma que se niega a rendirse. En su camino, se encuentra con Matthieu Chavanel, un aliado inesperado, un compañero que no solo comparte su pasión por la danza, sino que se convierte en el pilar que sostiene su lucha contra la soledad y el sacrificio.
Esta historia, como un drama coreano llevado al extremo de la exuberancia emocional, no se detiene en superficialidades ni en clichés románticos. Es un relato cargado de intensidad y pasión, donde cada caída es una oportunidad de resurgir, y cada sacrificio es una ofrenda al arte y a la vida misma. Théophile y Matthieu, juntos, desafían un mundo donde el dinero aún intenta dictar los sueños, demostrando que la verdadera grandeza se forja en el esfuerzo humano, en el poder del apoyo mutuo y en la búsqueda de la belleza en medio del caos.
En el escenario de la vida, Théophile no solo baila; él vive.
Autor: Alexis Saavedra.
Derechos a la ilustración de portada a la queridísima: @lidiceArcos en Wattpad.
Y en Instagram como: @LidiceArcos
Todos tienen su propia versión de la misma historia.
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