El hombre del que se había enamoró no era como él creía, en absoluto. Fluke era un joven fuerte e independiente que tenía el dinero justo para sobrevivir. Cuando se enamoró de Ohm Thitiwat, lo creyó su alma gemela porque él también llevaba una vida sencilla en la Italia rural y también era hijo ilegítimo... Pero al ver su casa por primera vez se dio cuenta de que no era el hombre que él pensaba: vivía en una casa enorme, poseía otras dos villas y su tío era un conde. Y aún le quedaba otra sorpresa: resultaba que tampoco era hijo ilegítimo, con lo que se convertía en el heredero del conde. Aquello era una verdadera pesadilla porque Fluke no tenía la menor intención de convertirse en esposo de un conde.Public Domain