" Quella notte di mancanza di controllo "

Lilith y Theodore jamás se habían llevado bien. Su relación siempre estuvo marcada por la indiferencia y los constantes roces; cada conversación entre ellos terminaba en una discusión, como si estuvieran destinados a chocar una y otra vez. Sin embargo, al llegar a Hogwarts, algo en esa dinámica comenzó a cambiar.

Todo se salió de control la noche en que Draco Malfoy, con su arrogancia habitual, organizó una fiesta de bienvenida donde, sorprendentemente, todas las casas estaban invitadas. La Sala Común de Slytherin, convertida en un espacio vibrante de música y luces, se llenó de estudiantes que se dejaron llevar por el ambiente despreocupado. Fue ahí donde Lilith y Theodore, atrapados en la efervescencia de la noche, se vieron obligados a enfrentarse en un terreno desconocido.

Entre miradas desafiantes y comentarios mordaces, la tensión entre ellos tomó un matiz diferente. Lo que antes eran simples roces ahora se sentía como un desafío implícito, una batalla de voluntades que ninguno estaba dispuesto a perder. Pero cuando un juego imprudente -quizás una apuesta de Malfoy o un hechizo mal lanzado- los empujó a un momento inesperado, ambos se dieron cuenta de que aquella hostilidad contenía algo más profundo.

Lo que parecía una noche como cualquier otra podría convertirse en el inicio de algo mucho más complicado... y peligroso.