En un acto oficial de entrega de notebooks a estudiantes, Axel Kicillof, el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, se encuentra frente a un grupo de jóvenes que han sido seleccionados para recibir una computadora portátil como parte de una nueva iniciativa gubernamental. Cuando llega el turno de Luca Arias, un estudiante tímido, pero brillante, se genera una conexión inesperada entre ambos. Frente a las cámaras y con todo el protocolo del evento, Axel le entrega la notebook, pero lo que debería ser un simple gesto se transforma en algo mucho más personal. En ese instante, algo en sus miradas se cruza, y una chispa de algo profundo se enciende.
Aunque los dos intentan seguir con la ceremonia, las emociones se desbordan y el recuerdo de ese encuentro se queda en sus mentes mucho después de que se apagan las cámaras. La vida de ambos cambiará de formas inesperadas, y ese momento, aparentemente trivial, se convertirá en el inicio de una relación que ni ellos se atrevían a imaginar.
Kugisaki no podía permitir que Itadori tuviera una pareja antes que ella, por lo idea un juego absurdo para el que involucra a Fushiguro, sin pensar en las consecuencias.