Story cover for Inesperadamente, tú. by M_A_J_A_S
Inesperadamente, tú.
  • WpView
    Reads 69,708
  • WpVote
    Votes 5,477
  • WpPart
    Parts 36
  • WpView
    Reads 69,708
  • WpVote
    Votes 5,477
  • WpPart
    Parts 36
Ongoing, First published Feb 18
Mature
Juanjo jamás había dejado de cumplir una norma. Quizá tan solo una vez en su vida, de joven, y se arrepentía. Para Martin, las normas estaban para llevarlas al límite y, en caso de ser posible, saltárselas.

A Juanjo, la rutina le daba seguridad, le mantenía en su zona de confort. A Martin, le aburría y la evitaba a toda costa, buscaba cómo romperla.

Juanjo necesitaba que todo estuviese bajo control. Martin, fluía desenfadadamente por donde la vida le llevaba.

Conocerse les cambió la vida a los dos... inesperadamente.

La vida a veces es como una escena de película. Dependiendo del momento sería una película de vaqueros, una comedia romántica o bien familiar, una de ciencia ficción... Ya veremos que nos va deparando cada día.
All Rights Reserved
Table of contents
Sign up to add Inesperadamente, tú. to your library and receive updates
or
Content Guidelines
You may also like
You may also like
Slide 1 of 10
saraluna  cover
Flor de Moncayo (Juantin) cover
Donde Nace el Caos cover
Finlandia cover
𝐧𝐚𝐧𝐤𝐮𝐫𝐮𝐧𝐚𝐢𝐬𝐚 cover
Más que un simple match cover
Cuando no sé quién soy - Juantin OT2023 cover
It's me who's been making the bed cover
el club cover
LA LUZ DE LAS LUCIÉRNAGAS cover

saraluna

27 parts Complete

Una fiesta. Cuatro copas de más y una conversación diferente. Un chico. Pero Juanjo, solo fue capaz de recordar una sola cosa. Martin. Ese estúpido nombre. Martin, Martin, Martin Dos semanas. Dos semanas tratando de buscar algo; alguna pista, algo que le condujera a aquel chico. Sin tener nada más que no fuera un nombre. Una conversación sobre pájaros, pintura, casualidades y el destino. Dos semanas perdidas que no llegaron a ningún sitio. Al menos, no como Juanjo esperaba. Desgraciadamente, su corazón no opinó lo mismo cuando lo vio. En esa camilla. Sangre. Luces. Sirenas. Ruido, demasiado ruido. Martin Urrutia. Veintitrés años. Parada cardiorrespiratoria. Traumatismo. Heridas y contusiones por todo el cuerpo. Y Juanjo solo pudo pensar una cosa. En esa frase que se le vino a la cabeza. De repente. Como un destello. Esa frase que le dijo antes de irse. Antes de quedarse marcado en su corazón de por vida. Esa misma vida que se jugaba Martin.