Luego de décadas de guerras, el clan Namikaze y el clan Uchiha se vieron forzados a realizar un trato de paz. El señor feudal ya estaba cansado, eso debía sellarse. Pero para asegurarse que se cumpliera, harían dos alianzas matrimoniales. El segundo hijo del líder del clan, Sasuke Uchiha, sería el doncel del hijo mayor del líder del clan Namikaze, Naruto.
Ninguno de los dos novios estaba dispuesto al principio, uno menos que el otro, Naruto pensaba que sí tenían suerte, se llevarían bien.
En cambio, Sasuke tuvo que ser llevado prácticamente a rastras y vestido casi a la fuerza para la ceremonia, Itachi quiso negociar con los demás sobre posponer la boda pero Fugaku le dijo que ése era el deber de su hermano.
Sasuke no quería ir, se sentía como una moneda de cambio o una posesión que cambiaría de dueño, su madre intentó animarlo bordando sobre el símbolo de su futura familia el del clan Uchiha para al menos mantener algo de dignidad. Naruto comprobó que los rumores eran reales al subir el velo de Sasuke... También los dichos sobre su lengua venenosa.
-Aunque cumplamos con nuestro deber, jamás seré del clan Namikaze, idiota. No seré propiedad de nadie, atrévete a llamarme tuyo una vez y clavaré un kunai entre tus piernas.
Y ése fué el inicio de un matrimonio que los llevaría a conocer muchos juegos de la historia de sus familias.