𝔻𝕖𝕤𝕥𝕚𝕟𝕠 𝕊𝕒𝕚𝕪𝕒𝕛𝕚𝕟 - 𝕊𝕠𝕟 𝔾𝕠𝕙𝕒𝕟

Desde que tenía memoria, Lita Satan supo que era diferente.
No solo porque podía moverse más rápido que cualquiera, o porque su cuerpo reaccionaba instintivamente antes de que su mente lo hiciera. No solo porque podía derribar a cualquier oponente con un solo golpe si se lo proponía. No. Lo que la hacía diferente... era que no podía demostrarlo.

A ojos del mundo, ella era la segunda hija del gran Mr. Satan, el hombre que había salvado a la Tierra de Cell. Una luchadora prometedora. La heredera de un legado. Pero la realidad era otra: Lita se contenía. Cada puñetazo que lanzaba en sus entrenamientos era calculado. Cada movimiento que hacía, medido. Dejaba que Videl brillara más, permitía que los demás la subestimaran... todo para evitar preguntas.

Porque si alguien llegaba a notar lo que realmente era capaz de hacer, todo cambiaría.

Pero no era miedo lo que la detenía. No. Lita no era una cobarde. Sabía de lo que era capaz. Sabía que podría vencer fácilmente a cualquier peleador en la academia de su padre. Sabía que podía derribar a los criminales con los que Videl se enfrentaba cada noche sin siquiera esforzarse. Y sin embargo, fingía que no. Se limitaba a cubrir a su hermana cuando era necesario, a intervenir solo en el último segundo.

Porque si alguna vez mostraba su verdadero poder... ¿qué pasaría? ¿Cómo la vería Videl? ¿Cómo reaccionaría su padre? Sin embargo, todo cambió el día en que él llegó.

Son Gohan.
El chico nuevo, de sonrisa tranquila y mirada que parecía verlo todo. Desde el primer momento, Lita supo que había algo extraño en él. Algo que no encajaba con el resto de los estudiantes. Algo... familiar.

Y entonces, por primera vez en su vida, Lita se preguntó si realmente podía seguir ocultándose.

Porque tarde o temprano, la verdad siempre sale a la luz.

Y la sangre de un guerrero jamás puede permanecer dormida