-Algunas personas no roban lo que tienes, sino lo que eres, y lo hacen con una sonrisa que oculta el abismo de su alma.-
Ivonne vivió una vida tranquila en el campo, rodeada de su familia, entre la calidez del hogar y la belleza de la naturaleza. Pero esa vida perfecta se desmoronó un día con la muerte inesperada de sus padres en un accidente. En ese vacío de desesperación y dolor, su tía Madelyn, hermana de su padre, se llevó a Ivonne, arrancándola de los brazos de Luna, su otra tía, que, incapaz de ser madre, había encontrado consuelo en los antidepresivos para callar sus propios demonios.
Madelyn, a diferencia de Luna, sí podía tener hijos, y esa capacidad la convirtió en una mujer peligrosa. En su mente retorcida, tener a Ivonne bajo su control significaba no solo un poder sobre la niña, sino una forma de compensar la vida vacía que siempre había vivido. Madelyn nunca pensó en Ivonne como una niña que necesitaba protección; para ella, Ivonne era solo una pieza más en su macabro juego de poder. Madelyn usó cada recurso a su disposición: humillaciones, abusos, manipulaciones y una crueldad que no dejaba espacio para el amor.
Pero cuando todo parecía perdido, Andrómeda apareció. Encontró a Ivonne en el peor de los lugares: un prostíbulo, el reflejo de lo que Madelyn había hecho con ella. Andrómeda movió cielo, mar y tierra para rescatarla, pero lo que Ivonne no sabía es que el rescate de Andrómeda solo era el principio. La verdad sobre Madelyn, sobre su sádica obsesión y los secretos oscuros que rodean su familia, está por desvelarse.
Ivonne lucha por recuperar lo que le fue robado, pero descubrirá que, al desenterrar la verdad, abrirá una caja de secretos que cambiarán para siempre lo que conocía sobre el amor, la familia y el dolor.
Madison observó al alto hombre que tenía delante de ella, su mirada fija en los ojos que eran casi iguales a los de ella. Aquel individuo estaba de cuclillas frente a su pequeña figura mientras le secaba las pocas lágrimas que tenía en las mejillas.
¿Por qué? ¿Por qué la trataba de esa manera luego de lo que le había hecho? ¿Por qué comenzaba a sentir que se merecía aquel castigo que él había decidido darle?
La pequeña metahumana estaba confundida por los nuevos acontecimientos a los que se enfrentaba. Estaba algo distante con Barry, con Caitlin, incluso con Cisco. Sí, seguía teniendo a su familia, pero los cambios habían sido inevitables.
Las cosas habían cambiado en pocas semanas y no tomaría mucho para que Madison descubriera el porqué. El nuevo individuo que había entrado a su vida le había hecho ser más cuidadosa con las decisiones que tomaba. Su pequeña cabeza ideaba planes para poder vencerlo, pero a veces no salía cómo ella quería.
Madison sentía que la vida volvía a desquitarse con ella, sentía que, tal vez, había cometido otro grave error y por eso la vida la estaba golpeando duramente. Aunque, quizás, esa vez su familia estaría ahí para ayudarla.
"No estás sola Madi", la menor trataba de convencerse de aquello cada vez que algo malo sucedería, pero, a veces, aquel mantra no funcionaba para apaciguar el dolor que sentía.
Sí, quizás, no estaba sola, pero prefería salir herida ella, antes que ponerlos en peligro a ellos.
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[LIBRO 2]
Segundo libro.
Para poder entender, debes leer el Primer libro: Innocent Blood.
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Advertencia / TW⚠: Algunos capítulos contendrá material sensible, no será algo tan profundo ni detallado, pero mencionaré: abuso emocional, violencia, trauma infantil.
👉Esta historia se desarrollará en le tercera temporada de la serie: The Flash (no seguirá tal cual los tiempos ni los escenarios de la serie)
👉No es una historia romántica