''Silence in the Waiting Room''- WINRINA

Instrumentos perfectamente esterilizados; precisión de francotirador; suturas y cortes que no dejaban ni una sola marca; excelencia en los procedimientos; pacientes renovados y familias satisfechas, cosas normales en el silencio del quirófano donde ella solía encontrarse. Yoo Jimin, una cirujana reconocida en todo el mundo por la gran cantidad de teorías e investigaciones exitosas en las distintas ramas de este área.

Su destreza era tan precisa, tan letalmente perfecta, que parecía desafiar a la misma muerte. Por eso, cuando fue trasladada al hospital más prestigioso de Corea, nadie dudó de que brillaría aún más.

Nadie, excepto Kim Minjeong.

Aquella mujer, con su sonrisa que curaba más que cualquier bisturí, fue el primer muro contra el que se estampó. Ella, que creía en la bondad de las palabras tanto como en la ciencia, chocó de frente contra la coraza impenetrable de Yoo.

Desde el primer cruce de miradas, la tensión entre ambas fue innegable. Jimin; fría y reservada; Minjeong, cálida y tenaz. Dos mundos que explotaban en cada decisión, en cada sala juntas, en cada operación. Pero incluso los corazones más fuertes tienen su punto débil.

Una noche, mientras las luces de la sala de operaciones encandilaban con su brillar, Yoo Jimin sintió el primer golpe. Un dolor agudo, implacable, que le hizo tambalear la precisión que siempre había sido su mejor compañera. Algo dentro de ella comenzó a quebrarse. Y por primera vez, la cirujana capaz de salvar a todos, tendría que enfrentarse a un enemigo que no podía extirpar con sus propias manos, sino con la ayuda de aquella mujer con ideas completamente opuestas a las suyas, con quien iba a tener que convivir día a día con tal de tener un futuro por vivir.