Prologo.
Fue hace exactamente 10 años, estaba en el jardín trasero de mi casa, la piscina estaba ya lista para ocuparla, yo con tan solo cinco años, era inocente, y quería descubrir el mundo, mi madre había entrado a la casa a buscar el protector solar, yo y mi mente inocente, me acerque a la piscina, todo paso demasiado rápido, aun puedo recordarla sensación de pánico que corría por mi cuerpo, me había caído en la piscina, y al ser una pequeña no sabía nada, flotar, ni nada que me pudiese salvar en ese momento, empezaba a hundirme, lloraba y trataba de gritar, pero el agua entraba en mi boca cuando quería entrar. Fue cuando lo vi, un chico de aproximadamente 18 años, cabello castaño y ojos verdes, me había salvado la vida sacándome de aquella piscina, al dejarme por fin en tierra firme, se marchó. Mi madre a los pocos segundos llego, al mirarme toda empapada se alarmo, preguntándome:
- ¿Te encuentras bien?- dijo alarmada a lo que yo le respondí
- Me encuentro bien mama, todo gracias El.- dije apuntando hacia el cielo. Mi madre sonrió.
Nunca olvidare la primera vez que lo vi, pero debo decir, que no fue la última vez.
Él se volvió parte de mí, era como un hermano para mí.
Siempre estaba cuando estaba a pocos pasos del peligro, y, a veces estaba solo porque él quería.
Él se volvió mi amigo, hermano, pero lo más importante.
Él se volvió, mi Ángel.All Rights Reserved