𝔸𝕃ℂℍ𝔼𝕄𝕀ℂ𝔸𝕃 | 𝔽𝕚𝕟𝕟 𝕎𝕠𝕝𝕗𝕙𝕒𝕣𝕕

Dicen que la alquimia es el arte de transformar lo imposible en oro. Pero en esta historia, no es el plomo lo que se convierte en luz, sino el destino. Lo ordinario en extraordinario. Lo imposible... en inevitable.

Lady Adelaide Barnes, hija del duque de Valmont, siempre fue diferente. Mientras las demás jóvenes de su edad soñaban con bailes y alianzas matrimoniales, ella se perdía entre libros de alquimia, teorías elementales y misterios que no tenían cabida en los salones de la alta sociedad londinense del siglo XIX. Curiosa, brillante y decidida, vivía entre frascos burbujeantes y cuadernos manchados de tinta, construyendo fórmulas que nadie se atrevía a mirar en serio.
Hasta que una noche, el mundo cambió.
Él llegó entre la niebla: un joven extraño, de ropas ajenas al siglo, con palabras modernas y una mirada que parecía venir de otra vida. Finn Wolfhard, estudiante de física del año 2024, no pretendía encontrar a nadie. Solo buscaba una oportunidad para reencontrarse con su pasado. Pero el destino lo lanzó a un jardín ajeno, frente a una joven que no sabía que su mundo estaba a punto de fracturarse para siempre.

No fue un encuentro cualquiera. Fue el inicio de una transformación silenciosa. Aquel físico del futuro, y aquella alquimista del pasado, comenzarían una historia tan improbable como hermosa, hecha de descubrimientos, roces que quemaban, miradas que desobedecían las reglas del tiempo y del deber.

Esta es una historia sobre alquimia, sí.

Pero no la de convertir metales en oro.

La verdadera alquimia ocurre cuando dos almas que nunca debieron encontrarse lo hacen.

Y se eligen.

Contra los siglos.

Contra las normas.

Contra la lógica.

Porque a veces, el amor también es una fórmula.