Kai el futurista en danmachi
(Lefiya está sentada en el claro de un bosque cerca de Rivira, rodeada de libros y flores. Una brisa suave mueve su cabello mientras observa una pequeña chispa azul flotando frente a ella. Sonríe, pensativa, mientras su voz, dulce y melancólica, comienza a relatar.)
-"En un mundo como Orario, uno pensaría que ya lo hemos visto todo.
Dioses descendiendo del cielo.
Magia que dobla la realidad.
Héroes que nacen de la nada...
Pero nada me preparó para él.
Kai.
No es un aventurero común.
No reza a los dioses.
No canta canciones épicas ni lanza conjuros antiguos.
Porque Kai... viene de otro mundo.
Un mundo sin dioses.
Un mundo donde las personas volaban por el cielo no con hechizos, sino con tecnología.
Donde la magia era reemplazada por ciencia... y los milagros eran inventados por hombres como él.
En uno de sus experimentos, intentando romper las leyes de su universo, lo perdió todo.
O... tal vez, lo ganó.
Porque cayó aquí.
En Gekai.
Y fue hallado por una pareja de elfos de sangre pura.
Sabios. Antiguos. Orgullosos.
Pero ellos vieron algo en él...
No su origen extraño.
No su falta de maná.
Sino la chispa de un creador.
De un soñador.
Lo adoptaron. Le dieron un nuevo nombre. Un nuevo hogar.
Pero Kai... nunca dejó de construir.
Mientras los demás entrenaban magia,
él dibujaba planos imposibles.
Mientras otros soñaban con espadas encantadas,
él creaba armaduras que respondían al pensamiento.
Y mientras todos miraban a los dioses en busca de poder...
Kai miraba al cielo... como si pudiera alcanzarlo.
Él no es un héroe tradicional.
Él es el futuro.
Esta... es la historia de Kai.
El chico que cayó de las estrellas...
Y eligió no ser salvado por los dioses,
sino salvar este mundo con sus propias manos."
(Lefiya se pone de pie, cierra su grimorio y se queda mirando hacia Babel a lo lejos, con el viento agitando su capa.)
-"Tal vez la magia no es lo único que puede cambiar el mundo.
Tal vez... también lo pueda hacer una mente
