En un mundo donde el poder se mide por la espada, la magia y la voluntad, un joven de pasado incierto lucha por abrirse camino.
Asher Blackthorne no recuerda de dónde viene, pero sí a dónde quiere llegar.
Nacido sin un nombre, criado por un caballero legendario y forjado en la disciplina del combate, Asher se enfrenta a un destino que lo arrastra a través de academias, mazmorras y tierras olvidadas. Mientras el mundo se prepara para enfrentar amenazas cada vez más oscuras, Asher solo tiene una certeza: si quiere sobrevivir, tendrá que volverse más fuerte que nadie.
Con un poder latente que aún no comprende del todo, y aliados cuya amistad será puesta a prueba, Asher descubrirá que la verdadera batalla no siempre se libra con espadas... sino con decisiones.
En un continente marcado por reinos, secretos sellados y guerras que nunca terminaron del todo, comienza una historia de crecimiento, dolor y aventuras.
Una historia donde el poder no lo es todo... si no sabes en lo que creer.
¿Y si tu última batalla no fuera en la Tierra... sino después de la muerte?
Kael Thorne no era un héroe.
Era un hombre roto en un mundo roto.
Un soldado raso en el año 2145, donde el aire ya no era digno de respirarse y los hombres vendían su humanidad para sobrevivir un día más. Por amor a su familia, se ofreció a lo impensable: transformarse. Mutar. Convertirse en algo que pudiera resistir una Tierra moribunda.
Y murió sin saber si su sacrificio sirvió de algo.
Pero la muerte... no fue el final.
Kael despierta en un mundo de magia, dioses y fuego celestial. Un mundo donde los dragones no son bestias... sino deidades caídas, guardianes de los secretos del alma y del ciclo eterno del renacer.
Y él, un extraño entre profecías olvidadas, carga en su interior el eco de algo que no comprende.
Un poder que no pidió.
Un destino que no merece.
Un legado que no es suyo... pero que puede salvarlo todo.
En un universo donde incluso los dioses han caído, ¿puede un alma rota volver a levantarse?