Mi labor siempre fue proteger el bosque, desde pequeña me encargaron esa misión, ser la guardiana del bosque y de su árbol céntrico. Nunca había tenido amigos, había aprendido a vivir sola con la naturaleza y sus animales, y la verdad, me encantaba. Todo era tranquilo, casi nunca había problemas, y cuando los había eran problemas sin importancia, como echar a algún intruso del bosque.
Pero no sabía lo que se avecinaba, el bosque y su árbol céntrico estaban en peligro. Menos mal, no estaba sola en esta batalla
Mientras su mente comenzaba a aceptar lo inaceptable -que había sido invocado a otro mundo-, un sonido rompió el silencio como un cristal estrellándose contra el suelo.
Llantos.
Subaru se irguió de golpe. Los chillidos venían del fondo del callejón. Alarmado, se levantó, dudó por un instante... y corrió hacia el origen del sonido.
Lo que encontré al llegar le heló la sangre.
-No puede ser...
Siete canastas. Siete bebes. Recién nacidas, por su tamaño y fragilidad. Cada una envuelta en mantas distintas, cada una llorando con una voz tan humana como desgarradora.
- ¿Quién... quién haría algo así?
como siempre les traje otra historia traducida aqui el link del autor original:https://archiveofourown.org/users/Mikora/pseuds/Mikora