Sinner Like Her

Delilah Miller no es como Ginny. No llora en el baño. No escribe poesía. Y no sueña con huir de su madre.

Delilah es fuego frío, sonrisa cortante, y mirada de afilada. Es hija de Zion, pero nadie lo nota. Porque cuando entra en una habitación, el mundo ve a Georgia. Y ella no se molesta en corregirlos.

A diferencia de su hermana, Delilah no teme parecerse a su madre. Lo disfruta. Lo perfecciona.

Cuando llega a Wellsbury, no esperaba encontrar nada más que rutina. Pero entonces apareció Abby Littman.
Había algo en ella que le resultaba magnético. Quizá la forma en que evitaba mirarla a los ojos.

O tal vez cómo sus labios lanzaban veneno... sin el más mínimo remordimiento.

Y Delilah ama el veneno.