Transmigré en la peor novela de la historia y me vi obligado a salvar la trama
10 parts Ongoing Después de una noche de insomnio y malas decisiones, Shi Yiqing despertó en el peor lugar posible: dentro de la novela más absurda y ridícula de la historia, con personajes planos, giros incoherentes y guerras sin sentido. Armado con paciencia y conocimientos limitados, deberá mejorar diálogos, reparar la trama y, sobre todo, impedir que el protagonista sufra un cruel destino.
-Es el fin... -murmuró Jing Zhao.
Su visión era borrosa, la sangre brotando de sus siete orificios. Un profundo dolor partía su pecho y todo su cuerpo temblaba. Sus músculos no respondían, sus huesos parecían papilla, incluso su propia energía se había agotado.
El Rey Zerg estaba muerto, la guerra a punto de terminar. ¿Pero, y él? Era solo un arma rota y desechada.
Antes, había escuchado a los científicos decir con frialdad: "Su cerebro y núcleo se pueden preservar. Aún hay varias pruebas que podemos hacerle. Incluso podríamos clonarlo, imagina las posibilidades"
El solo pensamiento lo hizo estremecerse y sentir que le faltaba el aire. No. Prefería la nada, el vacío absoluto, antes de regresar a su dolorosa infancia.
Con un jadeo entrecortado, Jing Zhao hundió los dedos en su propio pecho, las uñas rompiendo la piel ya lacerada y quemada, hasta abrirse paso y sujetar su agónico núcleo espiritual.
"Si lo destruyo... seré libre..." pensó, con la mente hecha bruma y más allá de cualquier límite.
Justo cuando iba a hacerlo, vio vagamente un fuego carmesí acercarse con vivacidad y esperanza hacia él.
-¡Detente! -escuchó que gritó.
Pero era demasiado tarde. No le quedaba nada. El solo pensar en su futuro lo aterrorizaba.
-Déjame ir, por favor... solo seré una carga... -suplicó sollozante, cubriendo su dolor con el ruido remanente de la guerra.
Shi Yiqing, sin embargo, lo estrechó entre sus brazos y lo besó. ¿Cómo podía permitir que esta escena se desarrollara frente a él? ¿Cómo podía abandonar a quien más amaba?