Juanjo y Martin han sido mejores amigos desde que eran niños. Cada verano lo pasan juntos en el mismo pueblo costero que los vio crecer, disfrutando de la tranquilidad, las fiestas y las rutinas de siempre.
Todo transcurre como cada año, hasta que durante las fiestas del pueblo, una vecina cotilla los confunde con una pareja. Y a ellos como les encanta bromear, deciden seguirle la corriente. En cuestión de minutos, el rumor se esparce por todo el pueblo, y ellos, por pura diversión, comienzan a comportarse como si realmente fueran novios.
Pero como siempre dicen, entre broma y broma, la verdad se asoma. ¿Y si lo que empezó como un juego no fuera tan mentira como ellos creían?
Martin siempre se había dejado llevar por lo que pensaba que otras personas querían que fuera: capitán de un equipo de fútbol semi profesional y un intento de hijo del que sentirse orgulloso.
Cuando empieza la universidad, cada vez le es más complicado no cuestionar quién es él más allá de las expectativas ajenas.
Hasta que llega Juanjo Bona.
Y con él, una visión completamente nueva de lo que su vida podría ser si cedía a lo que realmente quería, a quien él era realmente más allá de todo lo que había fingido ser hasta ese momento.
Solamente tenía que dejar de hacerse preguntas y fluir.