Estamos Jodidos Por Tí.

Si quieres perderte conmigo en el infierno donde once demonios consumen tu alma hasta que no queda nada de ella, dónde te aman y alaban sin restricciones.

Grita yo, tan alto que tengamos que ponerte un micrófono en la boca para que se baje el volumen.

Ven conmigo, adentrarte en mi libro donde te recibiré con los brazos cerrados y el cerebro abierto.

Hay momentos que no sabemos un ¿Cómo?
¿Dónde?
¿Porque?
¿Cuando?

Y empezamos a preguntarnos.

¿Esta mal?

¿Esta mal que amo a los villanos?

¿Está que me guste que me protejan?

¿Que me mimen?

¿Que yo sea su debilidad?

La excepción

Porque amo que quieran matar a todo lo que se me acerca.

Amo que odien todo excepto a mi.

Ellos estaban rotos.

Yo lo estaba diez veces más.

Estaba echa pedazos.

No estaba dispuesta a demostrar lo tan rota que estaba y estoy.

Y ellos sin saberlo me sanaron.

No diré que sanaron mi corazón,
no,
porque ese maldito estaba echo polvo, cenizas y hasta humo.

Ellos hicieron algo distinto,
me dieron sus corazones,
aún sabiendo que temía amar
y podría romper sus fríos y oscuros corazones.

Antes de todo
lo único
que me hacía sentir orgullosa
es el que nunca baje la mirada,
los enfrente,
les grite,
les dije sus verdades en la cara sin filtros, ni anestesia.

Y ellos
lejos de alejarse,
de dañarme,
herirme,
destruirme,
Se obsesionaron
con un alma rota y atormentada de fantasmas del pasado.

Pensaron que sería como las otras,
Que al momento de que viera sus fantasmas, sus monstruos interiores iba a huir.

Que equivocados estaban,
ella lejos de lo que sus once demonios creían,
se enamoro de sus demonios,
Los provocó,
Les gritó,
Los enfrentó,

Y luego de toda esa basura
los amo,
con cada pedazo de su alma misma,
ya no con su corazón, no,
con su alma,
cuerpo,
mente,
con todo su ser,
ellos la sanaron y si alguien iba a romperla ¿quien mejor que ellos?.