Gael es un ángel guardián con un mala fama y que nunca en su vida ha hecho de ángel guardián apesar de ser catalogado como uno...
Su presencia en el cielo es irrelevante y aburrida hasta que el destino le juega una carta inesperada y se le asigna una misión: proteger a Sol, una chica rota por el duelo, la ansiedad y una enfermedad que la carcome día tras días robándole el brillo y las esperanzas.
Él baja creyendo -ingenuamente- que sería una tarea sencilla pero se encuentra con un alma que no cree en los angeles, aún cuando puede verlos.
Entre silencios que duelen, promesas difíciles de cumplir y miradas que hablan por si solas, ambos descubrirán que hay vínculos que no entienden de cielos ni infiernos y que una flor puede nacer incluso en el mayor de los caos.
Pero a veces, los milagros no llegan y el momento de decir adiós se hace presente.