"Algunas heridas no sangran. Algunas cicatrices no sanan. Pero incluso los monstruos tienen corazón... aunque este arda como las cenizas de un Fénix."
Han pasado cuatro meses desde que el archipiélago fue abandonado a su suerte.
El Norte guarda su silencio, pero al sur... el mundo arde con una llama distinta.
Valka, la madre perdida convertida en guerrera redimida, y Hipo, ahora conocido como el temido Night Hunter, han cruzado el océano con sus dragones -el indomable Chimuelo y la majestuosa Brincanubes- para continuar su guerra silenciosa: proteger a los dragones de los hombres, y a los hombres de sí mismos.
Pero la tierra que encuentran no es salvaje. Es civilizada, rica, y brutal a su manera.
Neustria, Reino Franco bajo el estandarte del emperador Carlomagno, ve en ellos no salvadores... sino amenazas. Monstruos paganos que montan bestias del infierno.
Atrapados entre pactos forzados y persecuciones religiosas, Hipo deberá contener no solo a sus enemigos, sino también al monstruo que ha aprendido a domar dentro de sí. Sin embargo, ni toda su sangre derramada lo preparará para lo que está por venir.
Porque entre murallas de piedra y manuscritos, Hipo conocerá a alguien que no empuña armas, sino palabras. Un escriba. Un humano que no le teme, sino que lo observa con ojos capaces de ver más allá del acero y la oscuridad.
Y mientras el amor renace en un corazón cubierto de cicatrices, la guerra sigue creciendo.
La verdad sobre los dragones será revelada, y con ella, la historia misma podría rescribirse... con fuego.
"En una tierra donde los dragones son pecado, y el amor es una herejía... el cazador de sombras deberá elegir entre la furia que lo consume, o la chispa que puede salvarlo."
Segunda entrega de la trilogía "I won't be the Hero you want..."
Un viaje entre culturas, fe, guerra y redención.
El mundo arde... y de sus cenizas, algo nuevo está a punto de alzarse.
𝐓𝐇𝐄 𝐕𝐄𝐈𝐋 | ❛Siempre susurras con tus labios llenos de muerte y brujería.❜
El velo del destino es una cortina invisible, un susurro que no debe ser tocado. El universo se encarga de que todo siga su curso, que el orden permanezca inquebrantable. Pero, en un rincón oscuro de su vastedad, ocurrió un error. Un niño debía nacer en un tiempo donde su vida podría salvar a otros cinco, pero ese niño nunca llegó al mundo. No en el momento adecuado, no sino después de treinta y cuatro años.
Los cinco niños murieron, y su asesino permaneció en las sombras, su rostro nunca revelado. El universo, tan meticuloso en su control, no pudo soportar esa grieta. El tiempo, esa entidad caprichosa, no perdona. Y para corregir el desliz, el universo actuó de la única forma que conocía:
Enviando a Finney Blake al pasado.