Sienna siempre eligió el camino seguro: los libros, las responsabilidades, el silencio de quien no se permite desear más de lo necesario. Hasta que Italia la recibe con sus calles antiguas y un aire distinto, dispuesto a cambiarlo todo.
Y en medio de ese paisaje, aparece Lorenzo: un chico de mirada intensa, reservado y aparentemente distante, pero con un amor silencioso por el arte, el saber, la vida. Con él, Sienna descubrirá que no todo se estudia ni se controla, que a veces el verdadero aprendizaje empieza cuando uno se atreve a sentir.
Una historia sobre los pequeños desvíos que terminan siendo el verdadero destino.