La Sangre También Miente

Esta no es la historia de una heroína. Tampoco de una víctima.

Alexis Black solo tiene un propósito: vengar la muerte de su madre.

Ella lo vio con sus propios ojos aquellos seres que ni en cuentos existen, que la historia se empeña en enterrar, que el poder llama invención.

Pero Alexis sabe la verdad. La vio. La recuerda.

Y por eso aprendió a ser todo lo que no quería:

A callar

A disimular el dolor tras una sonrisa impecable

A encajar en una familia donde todos ocultan algo, donde cada uno representa un papel que no les pertenece.

Solo quería ser como su madre.

La persona que más amaba. La que más admiraba.

Quería parecerse a ella, caminar con la misma luz, la misma fuerza, la misma perfección.

Pero por más que lo intentaba, siempre sintió que nunca sería suficiente.

Sin saber que, desde hace mucho, ya lo era.

Ahora, a los veinte años:

Con una decisión firme: ingresar a la Escuela de Guerra Basgiath, hacerse jinete, y abrirse paso entre dragones y secretos para encontrar respuestas.

Pero mientras la venganza la empuja hacia adelante, otra batalla arde dentro de ella:

Sanar las cicatrices que dejó su apellido, comprender que el amor a veces se muestra de formas equivocadas, y que las personas que la lastimaron quizás solo supieron protegerla del modo que conocían.

Y en medio de todo...

Alguien a quien debería mantener lejos. A quien, en teoría, no debería siquiera mirar. Y debería es alejar.

Pero entonces... ¿por qué es tan difícil?

Alexis no está segura de lo que siente.

Tal vez es fastido. Tal vez es algo peor.

O quizás... simplemente algo que no ha aprendido a nombrar.

Y aceptar esos sentimientos sería tan peligroso como acercarse demasiado a la verdad que tanto ansía.

Entre amistades, rencores y afectos que no sabe interpretar, Alexis deberá aprender que no todo es fingir.

Aunque fingir sea lo único que mejor sabe hacer.