El Canto del Abismo: La Vigilia de las Estrellas Caídas

Un reino submarino de cuevas ocultas y ríos de cristal, habitan los Bagrians, una raza ancestral de imponentes seres marinos con piel de escamas iridiscentes y la fuerza de los tiburones. Dotados de la metamorfosis, pueden transformarse en una forma monstruosa para dominar las profundidades, una forma para la discreción en la tierra, o un animal para deslizarse sin ser detectados. Su fe se centra en Thalassa Umbra, la reina de las mareas cambiantes, una deidad que se manifiesta a través de sus tres formas.

Cada cien años, Un lamento sangrado resuena desde las profundidades, anunciando el nacimiento de "las estrellas caídas"; armas destinadas a un sufrimiento inmenso. En un ritual místico, la luz elige a los Bagrians de corazón más puro, otorgándoles visiones de tragedias venidera y el collar del lamento, un objeto místico que los guía. Estos Bagrians elegidos, a menudo malentendidos por el mundo terrestre como criaturas agresivas, se embarcan en una misión silenciosa: proteger a estas almas desafortunadas, interviniendo discretamente para mitigar su dolor mientras mantienen su verdadera naturaleza oculta.

En este mundo de profundidades y superficie, destinos están entrelazados. Tharic, un guardia real de armadura oscura y piel pálida, lleva su ojo derecho la cicatriz de un pasado brutal. Con sus ojos negros y cabellos abache con matices azules, él es una de esas "estrellas caídas", un alma marcada por el infortunio que ha soportado pruebas inimaginables. Desde las profundidades, Hydron, un Bagrians de piel azul-grisáceo y ojos que brillan con tonos dorados, has sentido la llamada para proteger a Tharic. Sin embargo, lo que este ser marino no sabe es que ha llegado tarde; las heridas en el ojo de Tharic no son solo mala suerte, si no la prueba del infortunio ya ha llegado a golpearlo con fuerza. Hydron deberá encontrar nuevas formas de cumplir su promesa en un mundo donde la nobleza se oculta en las sombras abismales y el destino de las almas de