Yoonmin:(
Yoongi y Jimin se amaron con todo, incluso cuando el tiempo comenzó a arrebatárselo todo a Jimin.
Una enfermedad cruel y sin cura los obligó a vivir sabiendo que cada momento podía ser el último. A medida que Jimin olvidaba rostros, palabras... incluso cómo caminar, Yoongi se aferraba a los recuerdos, al amor, a las promesas.
Durante seis largos meses vivieron con el alma rota, entre hospitales, lágrimas y sonrisas prestadas. Hasta que un día, Jimin no despertó. El doctor le dio a Yoongi la sentencia más cruel: solo le quedaban 12 horas. Doce horas para decir adiós.
Entre risas dolorosas, confesiones del alma y bromas que ocultaban miedo, Jimin le dijo a Yoongi que se volverían a encontrar... en otra vida.
Y así, con una última sonrisa, Jimin partió.
Años después, destrozado pero de pie, Yoongi visita el parque donde solían ir. Y allí, un niño con una sonrisa familiar, ojos idénticos y un nombre imposible, le susurra:
"Te lo dije... nos volveríamos a ver."
---