Ambientación:
El continente de Zuryah está dividido en siete regiones, cada una regida por un clan dracónico ancestral:
- Volkhard, los de llamas negras
- Therion, los alados del trueno
- Nymira, dragones de agua cristal
- Ruveil, los custodios de la ceniza
- Skaelmar, los de escamas glaciales
- Igrohn, fuego puro
- Maldereth, los del aliento tóxico
Una profecía oculta entre los códices de piedra menciona un "legado híbrido" que nacerá cuando las estrellas se alineen en el ciclo del eclipse triple. Este ser llevará dentro de sí fragmentos de sangre dracónica de todos los clanes... y será el único capaz de portar la Corona Ígnea sin perecer.
Personaje principal:
Kael, un príncipe exiliado del reino de Ruveil, criado entre humanos sin conocimiento de su herencia. En una batalla fallida, su cicatriz emite un calor imposible... y empieza a escuchar voces en lenguas que no existen.
Conflicto inicial:
Los clanes, al detectar el despertar del portador híbrido, se dividen: unos buscan forjar alianza para restaurar el equilibrio, otros quieren usarlo como arma definitiva. Kael debe decidir entre convertirse en un conquistador guiado por los dragones... o en un puente para cambiar las reglas del mundo.