𝐕𝐄𝐑𝐀𝐍𝐎 𝐃𝐄 𝟐𝟎𝟏𝟕
Martin tenía doce años cuando su familia decidió veranear un mes en un pueblo de Menorca donde la familia de Juanjo, con trece años, tuvo la misma idea.
Los días transcurrían felices llenos de sol y arena para ellos, que junto a otros niños de la zona, no tardaron en formar un grupito con el que pasar las horas.
Martin era joven, apenas tenía experiencia, pero conforme pasaba el tiempo se dio cuenta de que ese niño rubito al que se pegaba todos los días le gustaba un poquito. Era algo que le daba miedo, sobre todo cuando Juanjo y Valeria, otra niña del grupo, empezaron un intenso y fugaz noviazgo veraniego.
Ese mes dio para mucho. En septiembre, para la vuelta a casa, ambos volvieron con el corazón roto. Habían pasado de ir juntos a todas partes a odiarse, algo que sus familias no lograban explicarse.
Por suerte, aunque ese suceso no les fuera a abandonar nunca en la memoria, no deberían volver a verse jamás.
𝐕𝐄𝐑𝐀𝐍𝐎 𝐃𝐄 𝟐𝟎𝟐𝟑
Con sus dieciocho años recién cumplidos, Martin está muy contento de decir que tiene su primer contrato laboral. Tan solo dura un mes, pero ya es muchísimo. Es monitor en un casal de verano y tiene muchísimas ganas, porque le encantan los niños y sabe que se lo va a pasar genial.
Este es el segundo año para Juanjo como monitor en el casal Cinco Rosas, que puede que no sea mucho, pero él siente que eso ya le da cierta experiencia. El verano anterior lo disfrutó muchísimo y tiene grandes expectativas para el actual.
Lo que ninguno de los dos espera es encontrarse a ese niño que hace seis años le dejó secuelas.