Lo que NO fuimos

Zerina vive entre dos mundos:
En uno, todo se rompe, las voces suben, las puertas se cierran con fuerza, el tiempo se arrastra y pesa pero en el otro, el que nadie ve, los árboles susurran, el cielo cambia de color según su ánimo y todo tiene sentido, aunque no exista
Soñar despierta es su refugio, su manera de no hundirse, su único rincón seguro de la realidad tan mala que vive, pero un día, algo cambia, una palabra inesperada, una presencia que no la hiere, una chispa en medio del gris
Y poco a poco, empieza a despertar, la vida real, la que antes dolía tanto, comienza a parecerse a sus sueños, ya no necesita cerrar los ojos para encontrar paz
Una historia sobre crecer en el desorden, sanar sin ruido y descubrir que, incluso en el caos, puede florecer algo hermoso