"Twisted Wonderland: El Encanto de los Corazones Felinos"

No debería estar respirando. No debería estar pensando. No debería estar... nada.

La última imagen que recuerdo es sangre. La mía. Y el deseo que no alcancé a formular antes de que todo se apagara.

Pero justo cuando el mundo se cerró, una voz lo rasgó. No era humana. No era amable. Era un eco que venía del espejo. Un espejo que no reflejaba, sino que devoraba.

"No es tu final." Eso dijo. Y entonces, el vacío se llenó de oscuridad.

No desperté. No fui revivida. Fui trasladada.

El ataúd no es frío. Es contención. Como si el mundo me estuviera guardando para algo que aún no existe.

El carruaje no avanza por caminos. Se desliza por la grieta entre mundos. No hay caballos. No hay conductor. Solo oscuridad que sabe a destino.

No tengo cuerpo. No tengo heridas. Solo conciencia. Y una pregunta que no necesita respuesta.

La tapa se abre. No por magia. Por mandato.

Night Raven College se alza frente a mí. No lo conozco. Pero algo en mí lo reconoce.

No tengo uniforme. No tengo reglas. No tengo historia que este mundo entienda.

Pero tengo garras. Tengo magia. Y tengo una sonrisa que sobrevivió a la muerte.